A PROPOSITO DE GIUNTI (II)

Carburando On-Line - 21/07/2008

El ingeniero argentino Carlos Funes, una de las autoridades técnicas más capaces de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), leyó un par de semanas atrás en carburando.com una nota retro sobre un episodio que él mismo había vivido en persona hace casi cuatro décadas, y decidió contarnos esas vívidas impresiones, de indudable valor periodístico. Por eso es que decidimos reproducir sus conceptos: 

"Leyendo 'A propósito de Giunti', desearía adicionar un breve comentario, dado que me tocó tristemente estar justo de frente a donde la Ferrari del italiano pararía ya en llamas definitivamente. 
"De hecho la historia comentada es por demás cierta. Si por un lado los Porsche 917 tenían el maravilloso equipo de John Wyer y cuatro eximios pilotos, no es menos cierto que el auto tenía una confiabilidad absoluta pese a ser (como dijo en mas de ocasión el recordado Pedro Rodríguez) extremamente "delicado" de conducir. Para enfrentarlo, Ferrari apostó en realizar un verdadero Formula 1 transformado en Sport Prototipo, pero los accidentes no vienen solos y sí son la suma de muchas cosas. 
"Los 917 tenían que parar más veces que la Ferrari, y Giunti jugó sus cartas en la primera parada de los autos de Wyer, que siguiendo su maravillosa organización se detuvieron todos juntos y salieron como el viento igualmente unidos con un sincronismo único. 
"La Ferrari tenía los 917 bien a la vista (algo casi como media recta principal del Autódromo) a la vista en el momento de la parada, y fue notorio como Giunti aceleró al máximo tentando aprovechar la parada de los Porsche para ganar una distancia grande en ese momento. 
"Allí apareció el incidente del Matra (del que, como bien dice la nota, juntó responsabilidades de muchos), del cual no creo que ni el propio Beltoise sepa, aún hoy, como salió con vida, pues recuerdo claramente como, después del impacto que le sacó de las manos su auto que en forma más que imprudente empujaba por la pista, se quedo congelado. "Recuerdo que cuando pasó por los boxes viejos, que no se utilizaron en esa carrera, un fotógrafo cayó desde la marquesina que cubría como ala la calle de boxes (seguro intentando de sacar una foto de la Ferrari en fuego) y cayo a centímetros de Beltoise que, en estado de shock, ni se dio cuenta y siguió caminando con la vista perdida. 
"Han pasado 37 años de aquel 10 de enero de 1971, y aun cierro los ojos y veo rodar la Ferrari en una bola de fuego. 
"En realidad, la Ferrari de Giunti venía atrás de dos rezagados, siendo uno de ellos la Ferrari 512M de Mike Parkes, quien vio el obstáculo y se desvió para la izquierda, siendo que el otro auto hizo lo propio para la derecha, quedándose Giunti de frente al Matra, al cuál impactó en plena aceleración. 
"Recuerdo (y aun tengo las fotos) que los bomberos actuaron bien rápido (para los estándares de época), y que pese a lo impresionante de las fotos de la Revista Gente, Giunti no estaba carbonizado y menos muerto. 
"Su muerte no fue producto de las quemaduras que eran, aún para los estándares médicos de época, pasibles de supervivencia, pues eran de 60%. El problema fue la explosión de los tanques de combustible que, básicamente, rodeaban el cockpit del auto (como era el estándar de la época) y el correspondiente vacío generado por la explosión, que literalmente reventó todos sus órganos, motivo por el cual moriría horas después en el Hospital. 
"Un recuerdo triste de un día nublado de enero de hace ya muchos años que aún está fresco en mi memoria?"

Hasta aquí, los valiosos recuerdos del ingeniero Funes. Valga agregar que el fotógrafo mencionado se llamaba Lucio Solari, trabajaba para el diario La Nación y que sufrió algunas contusiones pero nada grave en la caída. La foto que acompaña esta nota es la de ese momento, con Beltoise en estado de shock, como describe Funes, y el fotógrafo caído detrás.